En esta edición 2024 de la Evaluación del Estado de Madurez en la Gestión del Talento Humano, participaron 34 empresas que representan a 13 países y un total de 49 mil empleados. Estas empresas abarcan distintos segmentos del sector eléctrico, incluyendo generación, transmisión, distribución y comercialización de energía. También participaron operadores del sistema eléctrico y autoridades regulatorias del sector eléctrico.
La encuesta, realizada entre los meses de mayo y agosto, se basa en un modelo de madurez que permite a los equipos de talento humano de las empresas autoevaluar su grado de desarrollo en diferentes dimensiones clave. Utilizando una escala Likert de 1 a 4, donde 1 indica ausencia de madurez y 4 representa un nivel maduro, las empresas califican su gestión en 160 preguntas distribuidas en 8 ejes temáticos: diseño de la organización, procesos de recursos humanos, gestión del talento, compensación y beneficios, analítica de datos, planificación del capital humano, sostenibilidad-inclusión-compromiso y cultura organizacional.
El Índice General de Madurez de cada empresa se calcula promediando las puntuaciones de estas dimensiones. Aquellas empresas que alcanzan un Índice General de 3,5 o superior son reconocidas por tener un Muy Alto Nivel de Madurez en la gestión de su talento humano.
En esta edición, 7 empresas lograron este reconocimiento:
- Empresa Generadora de Electricidad Haina (EGE Haina), República Dominicana
- ENERGUATE (Distribuidora de Electricidad de Occidente S.A. y Distribuidora de Electricidad de Oriente S.A.), Guatemala
- Empresas Públicas de Medellín E.S.P, Colombia
- ENSA (Elektra Noreste, S.A.), Panamá
- CONSORCIO ENERGETICO PUNTA CANA MACAO (CEPM), República Dominicana
- Coopelesca R.L., Costa Rica
- ISA REP – Red de Energía del Perú, Perú
Estas empresas han demostrado un compromiso sobresaliente en la gestión del talento humano, posicionándose como líderes en la región en términos de desarrollo organizacional y recursos humanos.
La autoevaluación continua y la aplicación rigurosa de este modelo de madurez son clave para el fortalecimiento y sostenibilidad del sector energético en América Latina.