Favorecido por las lluvias, el peso de la producción hidroeléctrica
fue de 51% entre enero y junio. La participación de las centrales térmicas fue
la más baja en al menos 20 años para ese período
La
generación de las represas hidroeléctricas mantuvo el buen desempeño mostrado
en los meses de verano y completó el mejor primer semestre de los últimos cinco
años.
Las cifras
oficiales muestran que la producción de las represas de Salto Grande y Río
Negro (Rincón de Baygorria, Rincón del Bonete, Palmar) que gestiona UTE
totalizó 3.402 GWh. Los niveles de generación son los más altos para el período
enero-junio desde 2019 (3.896 GWh) y fueron algo más del triple en la
comparación interanual
El gran
caudal de lluvias sirvió para que el 51% de la demanda de energía eléctrica se
abasteciera con esta fuente de generación.
Los datos
desagregados por represa indican que la producción hidráulica de Salto Grande
se multiplicó casi por tres veces respecto a 2023, y en las represas del Río
Negro los aportes se cuadriplicaron.
Otro dato
que sobresale en el primer semestre es la escasa generación de energía térmica
con apenas 106,4 GWh y una participación de solo 1,6% en el total, según datos
procesados por El Observador. Se trata de los registros más bajos para esta
fuente de generación al menos en los últimos 20 años.
La
generación con combustibles fósiles fue hasta inicios de la década pasada una
de las principales fuentes de abastecimiento de energía de Uruguay, en un
sistema que estaba expuesto a la variabilidad del recurso hídrico y a
inestabilidad de los costos.
Luego fue
perdiendo participación a medida que fueron escalando las energías renovables
no convencionales como eólica y solar, y hubo buena respuesta de la producción
hidráulica.
En el
último tiempo las centrales térmicas se han utilizado mayormente como respaldo
en épocas de sequía, como la de principios de 2023. Y en ocasiones puntuales
también se han encendido para vender energía a países vecinos como Argentina y
Brasil.
Las cifras
oficiales muestran que entre 2015 y 2020 el peso de la generación térmica en la
matriz total fue de apenas 4%, y de casi 11% desde 2021 a la fecha.
Tarifas
públicas e inflación
La
Rendición de Cuentas enviada el viernes pasado al Parlamento señala que las
tarifas de UTE y Antel se han fijado todos los años del período por debajo de
la inflación anual observada (con la excepción del año 2021 en el caso de las
tarifas telefónicas).
Esto “ha
implicado que todos los años se haya verificado una disminución en términos
reales del costo de los servicios públicos y una contribución a la disminución
en la tasa de inflación en la economía”, dice el informe.
En lo que
refiere a OSE, las tarifas presentaron en algunos años “leves incrementos
reales, contribuyendo de este modo al financiamiento al plan de inversión en
agua y saneamiento ejecutado por la empresa”.
Si se
considera la variación anual del Índice de Precios al Consumo (IPC) proyectada
para 2024 en la Rendición de Cuentas (4,9%), las tarifas de Antel presentarán
una disminución de 14% en términos reales en los últimos 5 años, mientras las
tarifas de UTE disminuirán 10,2% y las de OSE, 1,7%, según el gobierno. (El
Observador – Uruguay)
