En las dependencias del Inapi se realizó la primera sesión de
estas instancias, que abordarán diversas temáticas relevantes para el sector
energético.
En marzo
pasado, durante un seminario realizado por los 10 años de la generación
distribuida en Chile, se anunció la creación de la Mesa de Trabajo de Recursos
Energéticos Distribuidos, como parte de los objetivos de la Agenda de Energía
2022-2026. El propósito de esta instancia es actualizar los decretos D.S. N° 88
y D.S. N° 57, en respuesta a la Ley N° 21.505, de Almacenamiento y
Electromovilidad.
El objetivo
de esta iniciativa es habilitar la participación de los sistemas de
almacenamiento de energía en el mercado y reconocer a los vehículos eléctricos
como sistemas de almacenamiento con capacidad de inyección a la red (V2G). Así,
la modificación reglamentaria permitirá una integración más efectiva de estas
tecnologías en toda la cadena de valor.
Esta
actualización es necesaria para facilitar el despliegue de recursos energéticos
en las redes de distribución, y “es clave para hacer frente a los nuevos
desafíos que enfrenta el sector energético, tales como la integración del
almacenamiento y los problemas de congestión en las redes, y en general para
avanzar hacia un marco regulatorio que viabilice un mayor despliegue de los
recursos energéticos distribuidos y un mejor gestión de estos”, afirmó Mauricio
Riveros, jefe de la División de Energías Sostenible del Ministerio de Energía.
La cartera,
en conjunto con la Comisión Nacional de Energía (CNE), la Superintendencia de
Electricidad y Combustibles (SEC) y el Coordinador Eléctrico Nacional (CEN),
levantó un diagnóstico sobre la situación actual identificando cuatro ejes
principales de trabajo para la discusión de la mesa: Coordinación de la
operación, Conexión a la red, Nuevas tecnologías y Mercados.
Evaluación
de los gremios
En las
dependencias del Inapi se realizó la primera sesión de estas instancias que
analizarán diversas temáticas relevantes para el sector energético.
El trabajo
abordará estos ejes para actualizar los decretos mencionados, identificando qué
aspectos han funcionado bien y cuáles requieren ajustes con base en lo que ha
sido la experiencia adquirida en el sector y los desafíos que se enfrentan
actualmente.
Esto se
realizará a través de siete reuniones entre julio y septiembre con todos los
gremios relacionados con la energía, así como a representantes de la CNE, SEC,
y el Coordinador.
Los
resultados de este trabajo con la industria serán luego sistematizados y usados
para la construcción la propuesta de modificación que se llevará a consulta
pública, documento que será desarrollado con el apoyo de una consultora
contratada con el apoyo de GIZ, que acompañará el proceso. (Revista
Electricidad – Chile)
