El 99% la energía asignada fue solar, y 1% para plantas térmicas,
incluida biomasa un hecho que se da por primera vez en la historia del país
El viernes
de la semana pasada concluyó la Subasta de Cargo por Confiabilidad para el
Sistema Interconectado Nacional, SIN, en la que se lograron resultados
históricos que contribuyen con la transición energética.
De hecho,
uno de los datos que se vio más llamativo fue el de la incorporación de nuevas
plantas solares, pues, según el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho,
por primera vez en la historia, la energía asignada fue 99% solar, lo que
corresponde a 4,4 GW de plantas solares nuevas y solo 1% fue para plantas
térmicas, incluida la biomasa.
Esto
representa un avance en cuanto a la participación de la energía solar dentro de
la matriz energética, pues, la composición de la matriz
pasa de 66% hidráulico, 31% térmico y 3% de plantas solares – eólicas, a una matriz con 50% hidráulico, 24% térmico y 26% de plantas solares – eólicas.
Según
Camacho, “pasamos de una participación de 3% de fuentes no convencionales de
energía a 26%. Con la entrada de estos proyectos ingresan nuevos agentes y se
fortalece la competencia en el mercado de energía”.
Ante esto,
los analistas han visto con buenos ojos lo que podría ocurrir en los próximos
años con los resultados de la subasta.
En
principio, uno de los beneficios de lo que se logró la semana pasada es que “se
cubre una parte importante de la energía firme requerida por el país para 2027
y 2028, sin embargo, “será necesario buscar otras alternativas que permitan
cubrir la totalidad de los requerimientos al respecto, principalmente a través
de generación térmica con gas”, explicó Julio César Vera, presidente de Xua
Energy.
Otro de los
beneficios es que “se tendrá una oferta de contratos de generación de energía
con mejores precios para los proyectos de energía solar fotovoltaica”, añadió
Vera.
A esto se
suma, que “se continúa con el proceso de transición energética que el país
quiere profundizar a través del uso de fuentes no convencionales de energía, y
en este caso en especial, con energía solar fotovoltaica”, dijo Vera.
Ahora bien,
aunque tiene varios beneficios, hay cierto temor con el tiempo de entrada que
se estimó para estos proyectos. “La subasta fue parcialmente exitosa para la
demanda en términos de mayor capacidad renovable. Sin embargo, tiene la
incertidumbre de las fechas de entrada seguras, y faltaría la asignación de más
capacidad firme, eficiente de respaldo y confiabilidad”, indicó Sandra Fonseca,
directora de Asoenergía.
En línea
con esto, Vera mencionó que “el riesgo principal está en que los proyectos de
energía solar fotovoltaica no logren entrar en la fecha prevista y generen un
mayor déficit”. (La
República – Colombia)